Comienza mezclando en un bol la harina tamizada con la levadura y el azúcar. Añade poco a poco la leche para ir mezclando hasta lograr una masa homogénea.

Añade el huevo entero, y sigue batiendo para integrarlo por completo. Si quieres que te salga la masa mas esponjosa, un truco de la cocina japonesa es batir la clara a parte montándola a punto de nieve para añadir después al resto de ingredientes.

Utiliza una brocha para untar con aceite el molde, evitando así que se pegue la masa. Repite esta operación siempre antes de hacer un nuevo pastel.

Añade la masa en el molde, cubriendo el fondo con poca cantidad.

Pon en el centro de la masa aun cruda el ingrediente que mas te guste. Una cucharada de crema, chocolate, queso en crema, o pasta de alubias rojas. Hay muchas opciones para rellenar tus dulces como mas te guste.

Aplasta un poco el relleno para que se quede sumergido en la masa, y añade un poco más de masa cruda para cubrir el molde hasta el borde. No pongas demasiada masa para evitar que se espanda por todo el interior el molde.

Cierra bien el molde o la maquina de hacer taiyakis, y deja que se cocine. Si usas una maquina, el indicador luminoso te avisara cuando están listos tus pasteles. En caso de que uses un molde, dale la vuelta para que se cocine por ambos lados, dejándolo sobre el fuego unos 3 minutos mas o menos.

Retira del molde y deja enfriar un poco antes de tomar. Ya tienes listos tus pasteles japoneses de pez para disfrutar de su delicioso sabor.