¿Cuál es la capital de Japón?; Historia y curiosidades

Japón es un país muy conocido en todo el mundo, ya que su cultura despierta la curiosidad de propios y extraños en cada rincón del planeta. Seguramente si te preguntarán cuál es la capital de Japón, no tendrías dudas en contestar. Pero, ¿sabías que hasta hace muy poco tiempo ha habido otras muchas capitales japonesas?

Las increíbles ciudades de Nara o de Kioto han sido las favoritas de los emperadores japoneses para convertirlas en los centros políticos y económicos del país nipón. A lo largo de la historia, la capital se ha movido por todo el mapa del país, otorgándole este título a más de una ciudad japonesa.

Vamos a investigar cuál es la capital de Japón en la actualidad, y por qué se escogió esta ciudad como centro del país y de prácticamente todo el continente asiático. Pero también veremos que otras ciudades de Japón han sido importantes en la historia.

Desde la época medieval hasta la actualidad, seguro que te sorprenden todo estos datos sobre el país de Japón. ¡Toma nota!

¿Cuál es la capital de Japón en la actualidad?

Tokio es la capital de Japón, y en la actualidad, la ciudad más poblada de todo el país.

Con una población de más de 13 millones de habitantes, y una superficie de aproximadamente 2187 km², se encuentra entre las 50 ciudades más grandes de todo el planeta, y una de las que tiene mayor densidad de población del mundo.

Japón está compuesto por 47 prefecturas, y la totalidad de Tokio es una de ellas. La ciudad se forma por la unión de 23 barrios, 26 ciudades anexas, y otros pueblos y subprefecturas.

El centro de la capital se sitúa concretamente en Shinjuku, que es donde se concentran las sedes políticas, económicas, culturales, educativas y de comunicación de todo el país.

Se podría decir que justo este punto es la zona más central en el mapa, y debido a la perfecta localización de la ciudad, las comunicaciones por tierra, mar y aire son perfectas.

Tokio se fundó como ciudad en el año 1457, pero no empezó siendo la capital. De hecho, hay restos de asentamientos anteriores a esta fecha que datan del siglo III a.C., que auguraban un excelente futuro a la ciudad de Edo, como fue conocida en un primer momento.

¿Cuál fue la primera capital de Japón?

Como ya hemos indicado, Tokyo no ha sido la capital nipona desde sus inicios. En todo el país reinaron diferentes emperadores desde la prehistoria, y cada vez que uno adquiría poder, cambiaba la capital al lugar donde residía.

No se sabe exactamente cuándo se fundó Japón como país, pero se cree que esto ocurrió durante la prehistoria japonesa, en los periodos conocidos como Jomon y Yayoi.

En esta época había varias tribus distribuidas por todo el territorio, y existían diferentes centros políticos según la zona.

Cuando se unificaron estas tribus, Asuka se convirtió en la primera capital de Japón de toda la historia, entre los años 593 y 710 d.C.

Esta ciudad tomó como ejemplo la conformación de las capitales en su país vecino, China, comenzando a crear edificios de gran importancia, a comercializar con monedas oficiales, e incluso con la creación de los primeros templos budistas.

De esta misma época son los restos arqueológicos de Kofun, en Sakai, cerca de Osaka. Aunque Asuka era la capital, otras grandes ciudades empezaron a florecer y a luchar para conseguir el poder a través del mandato de los diferentes señores feudales y emperadores.

¿Cuáles han sido las capitales de Japón?

Entre todas estas tribus primigenias, una de las que cobró mayor importancia fue Yamato. A medida que las familias se fueron unificando, los hombres más poderosos se decidieron a nombrar a un emperador que fuera el gobernante de todo el país.

Es aquí cuando comenzó a fundarse la primera gran ciudad donde vivía la corte japonesa. No se trataba de una capital como tal, si no más bien el centro en el que vivía el hombre que mayor control tenía sobre el resto de ciudades y poblaciones.

Nara

Heijo-kyo fue el nombre que recibió la ciudad donde vivían los primeros emperadores de Japón. Actualmente conocida como Nara, esta fue la capital oficial de Japón desde el año 710 hasta el 794.

Nara tuvo en esta época alrededor de 200 mil habitantes, un número nada desdeñable considerando que gran parte de los japoneses vivían en pequeñas villas o en el campo. Aquí se encontraba el palacio de la familia imperial, los edificios políticos más importantes, y también se convirtió en la sede de la religión budista.

Hoy en día se conservan algunos de estos edificios de gran antigüedad en Nara. Un ejemplo de ello es el famoso templo budista Todai-ji con la estatua del Buda de oro o el palacio Heijo. Todo el conjunto de monumentos históricos de Nara son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Durante unos años, cuando el emperador Kammu subió al trono, la capital se desplazó a Nagaoka-kyu, en la ciudad de Osaka, donde estaba la residencia de este gran señor. Pero este cambio duró muy poco, porque 10 años después se volvió a establecer una nueva capital japonesa.

Kioto

La separación de la religión con la corte imperial llevó a consolidar la capital en la ciudad de Kyoto. Desde el año 794 hasta la restauración Meiji, la ciudad conocida como Heian-kyo, actual Kyoto, fue el centro de todo el país.

En Heian-kyo se situaba el palacio de los emperadores, los edificios gubernamentales y la sede del gobierno militar. Se decidió este emplazamiento en concreto porque estaba situado justo en el centro de la isla principal, en un lugar de paso de las principales rutas comerciales.

La antigua ciudad de Kyoto sigue manteniendo la estructura inicial de la que fue la capital más importante del país. Al igual que Nara, se construyó desde cero siguiendo el modelo de ciudades chinas que se extendieron por toda Asia en esta época.

Al norte de la ciudad estaba situado el Palacio Imperial, principal vivienda de los reyes. Partiendo del palacio hay una gran avenida, que separa dos barrios colindantes, aprovechando la llanura del valle para la construcción de múltiples edificios de viviendas y comercios.

Kamakura

Mientras que la corte imperial se mantuvo en Kioto, entre los años 1185 y 1392 tuvo lugar el periodo Kamakura, cuando la capital militar se trasladó a esta ciudad. Debido a su particular localización, junto al mar, esta zona era mucho más estratégica para luchar contra las invasiones exteriores.

Durante muchos años, el gobierno militar fue cambiando de emplazamiento según las necesidades del país. Las guerras contra países vecinos, y la participación de Japón en la Segunda Guerra Mundial, obligó al ejército a adaptar la localización de sus tropas, armas y artillería.

Sin embargo, Kioto era una zona muy segura y fácil de proteger, y por ello los emperadores siguiendo habitándola. Aunque la ciudad ha evolucionado a lo largo de los siglos, en ella se mantienen restos de los primeros edificios y la estética de los barrios tradicionales que actúan como un pequeño museo de los cambios que ha sufrido con el tiempo.

Todavía en la actualidad se conoce Kyoto como ‘la capital del este’, ya que es una ciudad de gran importancia histórica y cultural. Lo mismo ocurre con Kamakura, que sigue conservando su poder como ciudad militar.

Historia de Tokyo, la capital japonesa actual

De Kioto nos vamos a Tokio, otra de las ciudades más conocidas e importantes de Japón. ¿Por qué en pleno siglo XIX se cambió la capital de una ciudad a otra así tan de repente? Fueron varios los motivos que llevaron a tomar esta decisión.

Periodo Edo

Como bien sabemos, Tokyo es la capital del Japón actual. Además de ser de las principales ciudad en Japón, fue la elegida por el Gobierno Militar para asentar el grueso de su poder.

Esto ocurrió durante el periodo Edo, nombre que recibía la ciudad de Tokyo, entre los años 1603 y 1868. En esta época, por su localización junto al mar, las ciudades de Osaka y Tokio fueron las que crecieron más rápidamente.

Tan grande fue su expansión, que en un par de siglos superaron en tamaño a la propia Kioto, la capital imperial de aquel momento.

Revolución Meiji

Cuando terminó el periodo Edo comenzó la restauración Meiji en el año 1868. Hubo muchos cambios en Japón, pero el más importante fue la unión del poder imperial con el gobierno militar, lo que incitó que la corte se moviera a la ciudad de Tokio.

Justo a mediados del siglo XIX, Edo era todavía una ciudad a medio construir que apenas tenía un castillo y algunas poblaciones pequeñas alrededor. La corte bien podría haberse movido a Osaka o a haberse quedado en Kyoto. Pero fue precisamente este detalle por el que se creó ‘la capital del este’.

Cuando Edo pasó a llamarse Tokyo en 1868, su nombre oficial, se construyeron nuevos edificios, palacios y templos, con un crecimiento de la ciudad a pasos agigantados hasta convertirse en la metrópolis que es en la actualidad. El Castillo Edo que ya estaba construido en la zona pasó a llamarse Palacio Imperial.

Siglo XX

Siglos atrás, la ciudad Edo no llegó a prosperar del todo ya que estuvo marcada por varios desastres naturales. Ocurrió un incendio que acabó con gran parte de la ciudad, varios terremotos, y la erupción del Monte Fuji, entre otros.

Sin embargo, la localización de esta pequeña aldea de pescadores, junto a una bahía en la que la pesca era abundante, y la cercana ciudad de Yokohama que estaba creciendo rápidamente, puso a Edo en el punto de mira de los principales gobernantes del país.

Ya en el año 1542 llegaron los primeros comerciantes occidentales procedentes de España y Portugal. Esta zona fue una de las primeras en abrirse al mundo, hasta que la dinastía Tokugawa se interesó realmente por ella. Ya en el año 1721 era la ciudad más poblada de Japón y también de todo el planeta.

Tras el Gran Terremoto de Kanto, en 1923, la ciudad tuvo que reconstruirse casi por completo, y para ello se siguió un modelo más occidental. En la Segunda Guerra Mundial volvió a sufrir muchos daños, pero esto no impidió que la ciudad siguiera creciendo hasta nuestros días durante todo el siglo XX.

Curiosidades sobre la capital nipona que no conocías

¿Ya sabías cuál es la capital de Japón en la época medieval? ¿Conocías la historia de Kioto o de Nara como capitales oficiales en la antigüedad?

Ahora que sabes cual es la capital del estado nipón en la actualidad, nos centraremos en conocer un poco más sobre ella. Y es que la capital japo cuenta con siglos de historia incluso antes de ser la gran urbe que conocemos hoy en día.

• En la historia antigua de Japón no se menciona la ciudad de Edo hasta el siglo XII, cuando era un pequeño poblado de pescadores.
• Su nombre, Edo, viene de la familia que creó el primer castillo cercano al río y a la bahía, el clan Edo.
• Situada junto al Monte Fuji, un volcán que ha estado en activo durante siglos, Tokyo ha sufrido de múltiples terremotos, erupciones, inundaciones e incendios en los que han muerto miles de personas.
• Hoy en día, toda la ciudad está preparada para las catástrofes con múltiples sistemas contra todo tipo de desastres naturales, como los tifones.
• Durante un tiempo, Kyoto fue conocida como ‘la capital del oeste’ mientras que Tokyo fue ‘la capital del este’.
• La capital japonesa es la ciudad con mayor población del mundo y con una de las densidades de población más altas. Aunque su extensión no es muy amplia, cuenta con edificios de gran altura y viviendas de pequeño tamaño.
• Tokyo es conocida como la ciudad más segura del mundo, y uno de los destinos turísticos favoritos de los viajeros.

Descubre mucho más sobre la capital de Japón a través de esta completa guía que encontrarás en nuestro blog Japón Alternativo:

• Qué hacer y ver en Tokio | Guía de Viaje

Si quieres descubrir más sobre las antiguas capitales japonesas, también tienes disponibles otras prácticas guías turísticas para viajeros:

¿Y tú, conocías todos estos detalles sobre la historia de Japón y de la ciudad de Tokio? Sigue investigando y descubre muchas más curiosidades sobre la capital de Japón a través de nuestro blog Japón Alternativo.

(っ◔◡◔)っ Última actualización de esta publicación el 18 mayo, 2022 por Pili Rodriguez ♥

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