Aunque su apariencia sea tan frágil, los paraguas japoneses de papel wagasa están hechos para soportar los efectos de la lluvia, los rayos del sol y la potencia del viento, entre otras situaciones climatológicas adversas. Cuentan con siglos de historia, y siguen usándose para múltiples propósitos, dentro y fuera del país.
Seguro que los has visto en alguna ocasión. Se parecen a las típicas sombrillas o parasoles de papel de China, Tailandia o Vietnam, con algunas variaciones que los hacen únicos. De hecho, fueron introducidos en Japón a través de su país vecino, como otros accesorios chinos que forman parte de la cultura nipona.
¿Cómo un paraguas de papel puede proteger de la lluvia? La clave está en la resistencia del tipo de papel y la capa que lleva sobre este para que no se desgaste. Como bien sabrás, las lluvia japonesa es frecuentemente torrencial en la época de verano, y aún así el wagasa es muy efectivo.
A través de esta completa guía, te contamos todo lo que debes saber sobre este paraguas para el sol y la lluvia que tanto se usa en el país del sol naciente. Su procedencia, historia, fabricación, y muchas curiosidades que no sabías sobre la cultura japonesa. ¡Te sorprenderán!
¿Qué es un wagasa?
‘Wagasa’ es el nombre que recibe el quitaaguas o quitasol típico de Japón. Se trata de un paraguas tradicional japonés hecho de papel, protegido con un aceite para aumentar su durabilidad, y con una estructura de bambú muy ligera y maleable.
Los wagasa se han usado en Japón como paraguas y sombrillas, ya que de manera indiferente valen para protegerse de la lluvia y del sol. También hay modelos que son meramente decorativos, elaborados con diferentes tipos de materiales.
Los diseños de paraguas wagasa que encontrarás en Japón son infinitos, con decoraciones únicas para lucir en diferentes ocasiones. Si sabes dónde comprarlos, no tienen por qué ser caros. Se convertirán en un buen recuerdo de tu viaje o en un regalo singular para tus seres queridos.
Historia de los paraguas de papel japoneses
Según estimaciones, se cree que el wagasa japonés vino de China en el periodo Heian (794-1192), más o menos al mismo tiempo que la escritura del estilo kanji. Justo en este periodo pasó a utilizarse también en toda la península de Corea donde se creó el primero prototipo, la kinugasa, un tipo de dosel que se usaba sobre las estatuillas budistas.
Basándose en los tipos de parasoles que se usaban en China, mucho más sencillos, se mejoró su técnica de fabricación. En el periodo Muromachi (1333-1568) fue cuando se empezó a poner aceite en el papel para mejorar la resistencia al agua y a la humedad, empleándose también en días de lluvia.
Kioto fue una de las primeras ciudades en las que se empezaron a emplear los primeros paraguas, conocidos como Kyo-wagasa.
Años después, en el periodo Momoyama (a568-1600) se inventó una técnica para poder cerrar y plegar el paraguas. Hasta ese momento, los wagasa siempre estaban abiertos. Su uso se limitaba a las clases sociales más adineradas, que podían permitirse este artículo de lujo.
Ya en el periodo Edo (1600-1868), cada vez más personas podían tener su propio paraguas, convirtiéndose en un accesorio muy práctico para protegerse de las inclemencias del tiempo, pero también para utilizar como atrezo en bailes, obras de teatro, festivales, y otras ocasiones.
Hasta el periodo Meiji (1868-1912), los paraguas de papel eran los únicos que había en Japón. Con la apertura del país al resto del mundo, se introdujeron otros tipos de paraguas y sombrillas más modernas, tal y como las que utilizamos en occidente en la actualidad.
Tipos de wagasa
Según el diseño, los tipos de materiales usados, los colores, y otros pequeños detalles, hay varias modalidades de wagasa japoneses que puedes encontrar a día de hoy en el país nipón.
Vamos a ver los más comunes en la actualidad:
Bangasa
Empezamos por los paraguas japoneses más sencillos, con una estructura de bambú y resistente papel washi. Tienen una estructura fuerte, sólida y altamente resistente, tanto para el sol como para el agua.
Son típicos del periodo Edo, cuando la gente de a pie empezó a utilizarlos. Por ello suelen ser diseños duraderos, pero con pocas decoraciones, ya que lo que se busca es la practicidad.
Janome
Un poquito más elegantes son los janome, que son similares al los bangasa, pero con más decoraciones. Las varillas son de bambú, pero el mango es de madera, decorado con ratán enrollado para que se vea más bonito.
El papel washi que se utiliza es de algún color vivo, pintado a mano con preciosos diseños. Los hay para hombres o para mujeres, y aunque sirven perfectamente para la lluvia, su uso se reserva para actividades lúdicas bajo el sol, protegiendo de los rayos más potentes.
Higasa
Los paraguas higasa son más delicados, y se utilizan en obras de teatro kabuki, o en representaciones que hacen las geishas y maikos.
Decorados con patrones florales, el papel es semitransparente, emitiendo sombras bajo una luz suave.
Maigasa
En el caso de los maigasa, además de papel, se suelen utilizar materiales ricos como la seda para su fabricación. Son paraguas para bailar semitransparentes o totalmente translúcidos, de manera que los bailarines puedan ver al público a través de ellos.
Además de estos, hay otros muchos diseños, cuyos nombres pueden variar según la región del país. Los wagasa se hacen siempre de forma artesanal, y por lo tanto, no hay dos modelos que sean exactamente igual.
Modo de fabricación de un wagasa
Las sombrillas japonesas para el sol y la lluvia tienen un proceso de elaboración largo y complicado. En ocasiones, en la fabricación de un mismo wagasa tienen que participar varias personas, cada una de las cuáles se encargará de hacer una parte concreta de la estructura.
El paso a paso de la creación de un wagasa japonés es más o menos el siguiente:
- Se empieza preparando el bambú, cortándolo en la medida requerida para cada pieza.
- Los trozos de bambú se remojan en agua y se dejan secar al sol para que se ablanden y sean más manejables.
- A continuación se hace el teñido de las varillas con la tonalidad deseada.
- Las varas se calientan al fuego para ir dándole la forma.
- Se hace el rokuro, que es la parte central del wagasa, uniendo las varillas al mástil a través de hilos gruesos.
- Una vez creado el marco, se cubre con papel washi y pegamento. El papel se aplica en diferentes partes, contando desde un mínimo de 4 piezas, hasta 60 o 7o piezas de papel en los diseños más elaborados.
- También se coloca un papel en el interior, protegiendo la zona del esqueleto en la que se coloca la mano para abrirlo y cerrarlo.
- Con el pegamento ya seco, se pliega el paraguas para doblar y marcar correctamente los pliegues del papel.
- Aprovechamos para aplicar un trozo de papel washi en la punta o parte superior del paraguas, proporcionándole un extra de protección para que no entre el agua.
- Se vuelve a abrir el paraguas, aplicando laca para fijar bien el papel sobre las varillas.
- Una vez secada la laca, se pone aceite en toda la superficie, dejándolo secar.
- El artesano rematará los últimos detalles, añadiendo las decoraciones típicas de cada modelo tanto en la punta, como en el mango o en las varillas interiores.
Como resultado tendremos preciosas sombrillas resistentes al viento, el sol, la lluvia, y también la nieve, muy prácticas para su uso diario.
¿Para qué se usan los paraguas de papel en Japón?
El uso de los wagasa en Japón ha sido desplazado en las últimas décadas con la llegada de los paraguas modernos. Hoy en día es más común ver a los japoneses usando los típicos paraguas transparentes que están por todas partes. Sin embargo, todavía hay quien renuncia a dejar a un lado la tradición.
En días en los que la lluvia no es muy intensa, algunos japoneses, sobre todo mujeres, utilizan en paraguas de papel clásico. En Kioto y otras ciudades tradicionales, puedes ver a geishas y señoras vestidas de kimono protegiéndose de la lluvia con este tipo de accesorio.
De igual forma, los japoneses los usan para protegerse del sol en los meses de verano. Combinan muy bien con sus preciosos kimonos de algodón o yukatas, con diseños de lo más coloridos y alegres.
Los wagasa se usan en festivales, en ceremonias de santuarios como bodas o misas sintoístas, en espectáculos de baile y teatro, o como decoración en una ceremonia del té. A veces los encontrarás en la entrada de tiendas, restaurantes y cafeterías, usándose como sombrillas contra el sol, o para darle un toque de color a la fachada de los negocios.
Mantenimiento de los paraguas de papel
Aunque están hechos para resistir, el wagasa es mucho más delicado que un paraguas de tela o plástico, y precisa de cierto mantenimiento.
Uno de los tips más importantes es tener mucho cuidado al abrirlo y cerrarlo, evitando que las varillas se dañen. Sujeta siempre el paraguas por el mango, evitando cogerlo por la parte de papel o la vara central.
Si vas a usarlo para la lluvia, ten en cuenta que el interior no está impermeabilizado. Debes evitar que el agua toque la parte de dentro. Al llegar a casa, escúrrelo bien y déjalo secar en un lugar ventilado, manteniéndolo abierto.
No intentes secarlo con papel o con un paño, ya que el papel y el pegamento se pueden estropear. Tampoco utilices una fuente de calor directo, que afectaría a la forma de las varillas de bambú y a la integridad del washi.
El engrasado del papel se puede volver a realizar si se ha perdido con el uso. De igual forma, el papel se puede sustituir por uno nuevo llevándolo a una tienda especializada.
Pero si lo que se ha estropeado es la estructura interna, es más barato comprar uno nuevo que repararlo. Siempre puedes consultarlo con un especialista para saber si tu wagasa tiene opción de reparación.
Dónde comprar un wagasa en Japón
El paraguas o sombrilla japonesa de papel es un elemento básico que ha formado parte de la cultura de Japón desde hace mucho tiempo. Accesible a día de hoy para todo el mundo, puede convertirse en un precioso souvenir de Japón para traerte como recuerdo de tu viaje.
Pero, ¿dónde se puede comprar un paraguas wagasa en el país del sol naciente? Hay muchas opciones. Una de las más habituales es la ciudad de Kioto, cuna de la creación de su versión japonesa. Aquí encontrarás piezas artesanales increíbles, aunque generalmente algo caras. Algunas tiendas recomendadas en Kioto:
- Tsujikura
- 京和傘
- Kyoto Takashimaya Department Store
- おはりばこ
Los kyo-wagasa típicos de Kyoto se hacen totalmente a mano, usando bambú del mismísimo bosque de Arashiyama. De aquí son los que se conoce como paraguas de ojo de serpiente, o janomegasa, con un dibujo circular que al verlo desde arriba se aprecia como el ojo de este animal.
Además de Kioto, hay otras regiones en las que se han fabricado los wagasa de manera ancestral. La región de Gifu es de las más importantes, donde se produce la mayor parte del papel washi.
En la prefectura de Tottori, concretamente en Yodoe, encontrarás diseños espectaculares con colores únicos. Para opciones más económicas, podrás hacerte con tu wagasa en muchos mercados y tiendas artesanales de Tokio, o en la tradicional ciudad de Kanazawa, famosa por sus barrios de geishas y su barrio samurái.
Otros objetos curiosos de Japón
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- ¿Por qué en Japón utilizan paraguas transparentes?
- Teru teru bozu; El amuleto contra la lluvia en Japón
- ¿Qué es una mesa kotatsu? Origen y tipos
- Otoshidama; El arte de regalar dinero en sobres en Japón
- ¿Qué es el omikuji? Los papelitos de la fortuna japoneses
¿Y tú, conocías ya los wagasa japoneses? ¿Has tenido alguna vez en tus manos estas maravillosas sombrillas de papel? Aprovecha la oportunidad para hacerte con un bonito souvenir de Japón organizando tu viaje perfecto con los trucos y consejos que encontrarás en el blog.
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Apasionada de los viajes y completamente enamorada de Japón. Ya son 3 veces las que he visitado Japón. Nunca un país me conquistó tanto. Únete a nuestro grupo de Mochileros en Japón en Facebook o a nuestro grupo de Whatsapp e interactúa con otros viajeros. ¿Tienes alguna pregunta? Entra en los grupos y resuelve tus dudas con otros usuarios 🙂