Festivales en Japón en septiembre; ¡Todas las fechas!

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Festivales matsuri en Japón en septiembre

Japón se ha convertido en uno de los destinos turísticos favoritos de los viajeros de todo el mundo. Si bien la temporada alta de vacaciones suele ser el mes de julio, y sobre todo de agosto, visitar Japón en septiembre es una mejor idea ya que el turismo empieza a bajar.

El país nipón es muy seguro para visitar en familia o con amigos, y bastante económico si organizas tu viaje con antelación. Además de hacer las típicas actividades turísticas, no debes perder la oportunidad de sumergirte de lleno en su cultura, participando en festivales únicos que te dejarán fascinado.

A través de nuestro blog Japón Alternativo encontrarás muchas ideas sobre qué hacer en Japón en septiembre. Desde lugares turísticos de interés, museos, templos, santuarios, paisajes naturales, hasta las fiestas tradicionales de Japón que no todo el mundo conoce.

Entonces, ¿qué se celebra en septiembre que no nos podemos perder durante un viaje a Japón? Te contamos con todo detalle los mejores eventos en septiembre para que tengas la oportunidad de vivir en primera persona de qué se trata un matsuri japonés.

Owara Kaze No Bon (1-3 septiembre)

Una de las festividades en septiembre que cada vez cobra más protagonismo es este matsuri que se celebra en Yatsuo, una pequeña localidad de la prefectura de Toyama.

Situado en plenos Alpes Japoneses, en este pueblo se sigue el calendario tradicional japonés para rezar a los dioses para conseguir unas buenas cosechas en un día muy señalado.

Durante los días que se celebra el festival, cada noche se realizan diferentes ritos y danzas para apaciguar los vientos y tifones que a veces dañan las últimas cosechas de la temporada.

El baile principal se conoce como ‘danza del viento’, representado en las calles del distrito de Owara por diferentes bailarines masculinos y femeninos.

Todo ello, acompañado de la melodía del kokyu, una especie de violín japonés con 3 cuerdas de seda, el shamisen tradicional y un precioso cántico.

Durante más de 300 años de antigüedad que tiene el festival, se ha seguido la misma tradición.

Las calles se engalanan con farolillos de papel, bajo los cuáles toman asiento los visitantes para disfrutar de un bello espectáculo, y rematar la noche tomando algunas delicias y comprando souvenirs en los muchos puestos callejeros.

Hassaku Sai (4-5 septiembre)

El primer domingo de septiembre se hace una de las fiestas más interesantes de la ciudad de Kyoto.

Concretamente en el santuario Matsuno Taisha, contando ya con más de 130 años de tradición, y coincidiendo principalmente con los últimos días de la estación lluviosa.

En estas fechas es normal que la lluvia y el viento sea abundante en Kioto, y que las cosechas de arroz se vean afectadas antes de poder recolectarlas.

Para mantener distraídos a los dioses de la naturaleza y que la recolección sea más fructífera, se hacen varios actos en diferentes puntos de la ciudad.

Algunos de los más interesantes son la procesión del mikoshi, un santuario portátil de madera que llevan a hombros mujeres jóvenes vestidas de blanco.

Saliendo del santuario lo llevan en un largo recorrido hasta la zona de Arashiyama, haciendo el último tramo en barca por el río.

También se celebran los famosos nakizumo, muestras de danza shishimai, y de baile bon odori en el que pueden participar todos los visitantes.

Shuki Reitaisai (10 septiembre)

Hace nada menos que 12 siglos, en la ciudad de Imizu, también situada en la prefectura de Toyama, tiene lugar cada 10 de septiembre uno de los desfiles de mikoshi más impresionantes de todo Japón.

En este festival de otoño desfilan varios altares de madera por toda la ciudad recogiendo la mala suerte para liberar a todos sus habitantes antes de empezar la temporada.

La parte más importante del evento es el ritual que se hace justo al entrar en el santuario. Para no introducir la mala suerte dentro de este lugar sagrado, se hace una hoguera en la puerta sobre la que pasan los sacerdotes llevando los altares.

En este ritual llamado hiwatari shinji, en lugar de caminar por las brasa lo hacen directamente sobre el fuego para purificarse por completo.

Por muy rápido que intenten salvar el obstáculo de las llamas, más de un altar portátil y muchos participantes acaban con quemaduras graves.

Como espectador no corres ningún peligro, pero si lo deseas, tú también puedes formar parte de la procesión apuntándote al evento al contactar con el santuario Kushida Jinja con cierta antelación. ¿Te atreverías?

Hyoge Matsuri (12 septiembre)

Mientras que en algunas zonas del país se celebran fiestas en Japón en septiembre para pedir protección a los dioses contra las lluvias torrenciales, en Takamatsu, ciudad de la prefectura de Kagawa se pide por una cosecha próspera.

En esta ocasión, se aclama a los dioses de la lluvia que llenen la reserva de agua artificial de la que disponen en la zona.

Esta celebración tiene su origen en una sequía que afectó la región de Asano durante el periodo Edo.

Para solucionarlo, un rico guerrero samurái construyó la reserva de agua Shin Ike, y aún se le sigue dando las gracias por este gran favor que hizo a los habitantes de la ciudad.

Una procesión de divertidos personajes con máscaras y maquillaje de payaso hacen un desfile hasta el embalse.

Llevando sus propios santuarios portátiles, llenan las calles de alegría, bailes y música, hasta llegar a su destino dónde se introducen en el agua con los santuarios aún sobre sus hombros.

Tsurugaoka Hachimangu Reitaisai (14-16 septiembre)

Si vas a viajar a Japón en septiembre, y quieres incluir la ciudad de Kamakura en tu itinerario, reserva los días entre el 14 y el 16 para no perderte su festival más importante.

Durante este matsuri en el santuario Tsurogaoka Hashimangu se hacen varios eventos entre los que destaca la muestra de yabusame.

Además de bailes tradicionales, ceremonias de ofrendas, y desfiles de santuarios portátiles mikoshi, miles de visitantes se acercan a Kamakura para ver la competición de tiro con arco a caballo, típica de la época de los antiguos guerreros samurái.

Tampoco puedes perderte el ritual de purificación que se hace antes del amanecer el primer día.

Los sacerdotes del templo se acercan hasta la playa mientras aún es de noche, desnudándose para limpiarse con el agua del mar.

A partir de este momento tienen lugar el resto de actos y ofrendas que se centran en los rezos hacia los kami del santuario.

Kishiwada Danjiri Matsuri (18-19 septiembre)

Justo antes de la celebración del día de Respeto a los Mayores, en Kishiwada, Osaka, se hace una corta celebración que apenas dura un fin de semana.

Este es sin duda uno de los festivales danjiri más famosos del país, cuyo acto central es un desfile de carros tirados por personas.

Se trata de uno de los festivales en septiembre en Japón más sonados por la particularidad del evento. Cientos de hombres jóvenes tiran  de dos cuerdas atadas a una carroza de madera de más de 4 toneladas de peso.

En un acto que se conoce como yarimawashi, arrastran la carroza a toda la velocidad, tomando curvas cerradas al mismo tiempo que intentan no volcarla.

Ya por la noche, cuando cae el sol, las carrozas son tiradas por hombres y niños a un paso más tranquilo, iluminadas con lamparitas de papel que muestran los exquisitos detalles de las tallas sobre la madera.

Fabricadas por los mejores artesanos del país, las carrozas de madera representan animales sagrados, flores japonesas, paisajes y todo tipo de tallados decorados con preciosas pinturas de colores.

Keiro no Hi (20 septiembre)

Traducido del japonés al español, Keiro no Hi quiere decir literalmente ‘Día del Respeto a los Mayores’.

Una de las festividades nacionales del país que honra a los más ancianos, y demuestra la importancia que estas personas tan experimentadas tienen para el resto de la sociedad.

Este día nacional se celebra desde el año 1951. En septiembre de 1966 se cambió la fecha del festejo al tercer lunes de septiembre, con el fin de que coincidiera con el fin de semana para poder disfrutar de unos días extra de descanso.

Aunque no hay actos como tal para celebrar este día tan especial, lo habitual es aprovechar el puente para pasar tiempo con los mayores y hacerles regalos.

Los jóvenes cocinan para los ancianos, y en cada barrio se hacen ceremonias para que todos los vecinos puedan participar en bailes, juegos, ceremonia del té y degustación de dulces japoneses tradicionales que traen de vuelta a los ancianos a su niñez.

Tsukimi (21 septiembre)

En Japón existe una tradición muy antigua llamada tsukimi. Esta celebración coincide con lo que se conoce como jugoya, o ‘la decimoquinta noche‘, correspondiente a la noche número 15 del octavo mes del calendario tradicional japonés.

¿Qué ocurre en esta noche tan especial? Pues que sale la primera luna llena de otoño, una de las más importantes del año para los japoneses, ya que es la última del año.

Es tradición desde hace siglos reunirse en familia o con amigos para contemplar la luna, mientras se toman dulces tradicionales, se toma sake y se escriben poemas haiku.

Esta fiesta tiene su origen en la cultura china, y fue importada a Japón en el periodo Heian. Al principio se celebraba por parte de la nobleza del siglo VIII al XII, extendiéndose poco a poco al resto de la población.

Hoy en día está en desuso, aunque algunas familias y determinados templos se siguen organizando reuniones para no perder la tradición de dar la bienvenida a la luna de otoño.

Son típicas de esta fiesta las imágenes de los conejos que hacen mochi, ya que según la leyenda, los conejos machacan pasta de arroz al estilo tradicional sobre la superficie de la luna creando los cráteres.

En este festival japonés de la luna de otoño, las casas se decoran para la atención con tallos de miscanthus sinensis, que trae buena suerte y protección a todos sus habitantes.

Seimeisai Matsuri (21 septiembre)

Coincidiendo con la fecha del equinoccio de otoño, en el santuario Seimei de Kioto dan la bienvenida a la estación con una fiesta muy particular.

Esta celebración se hace desde mediados del periodo Heian, en memoria del astrónomo Abe no Seimei, considerado como una deidad en Kioto por haber salvado a la ciudad de varios desastres naturales.

El día antes del equinoccio se hace en el santuario un desfile de farolillos y una ofrenda al espíritu de Abe no Seimei.

Llamado Yutate Kagura, el ritual consiste en hervir agua en una olla, para que después una Miko purifique todo el lugar lanzando el agua caliente con unas ramas de bambú en todas direcciones.

Al día siguiente se hace el ritual del Shinkosai, en el que los asistentes hacen ofrendas florales y llevan té a la deidad.

El acto termina con un desfile en el que un grupo de jóvenes sacan varios mikoshi, moviéndose al ritmo de sus propios gritos, las campanitas que cuelgan del santuario portátil, y de la música de las flautas que los acompañan.

Shubun no Hi (23 septiembre)

A nivel nacional, la festividad de septiembre más importante es la que se conoce como Shubun no Hi, o ‘Día del Equinoccio de Otoño’.

Al igual que el Equinoccio de Primavera, esta festividad es de suma importancia, despidiendo el verano y la época de tifones, para que comience la estación otoñal.

Los practicantes de la religión budista aprovechan los días cercanos al Shubun no Hi para visitar a sus ancestros.

Limpian las tumbas y dejan ofrendas florales en el cementerio, o rezan en los propios altares que tienen en casa. Hay años en los que coincide el día de los mayores con el ‘Día del Equinoccio de Otoño’.

Cuando esto ocurre y tocan varios días de vacaciones seguidos, se conoce como la ‘Semana de Plata’, que muchos japoneses aprovechan para viajar a ver a sus familiares.

Choyo no Sekku (27 septiembre – 3 octubre)

El Choyo no Sekku es el festival dedicado a la flor del crisantemo, llamada Kiku en japonés.

Esta flor típica del otoño se cultiva de manera ornamental en todo Japón desde que fue introducida en el país alrededor del siglo VIII.

Hoy en día es un símbolo imperial, que cuenta con más de 30 especies diferentes en todo Japón.

Después de un largo verano cuidando las plantas para que florezcan, en septiembre se abren las preciosas flores de colores con una belleza espectacular.

Es común que se hagan muestras en muchos templos y parques del país en esta celebración estacional.

Si quieres disfrutar de la singular belleza del crisantemo, algunos sitios dónde puedes ir a ver las flores a finales de septiembre son el Santuario Meiji, el Templo Asakusa Kannon o el parque Hibiya, en la ciudad de Tokio.

Otros festivales japoneses recomendados

En nuestro blog Japón alternativo hemos visto cada mes cuáles son las fiestas en Japón más importantes, multitudinarias y curiosas.

Recuerda que para el mismo matsuri japonés pueden cambiar las fechas cada año, haciéndolas coincidir con los días festivos o los fines de semana según el calendario.